SANTIAGO. La Fiscalía de esta ciudad y la Policía Nacional investigan las causas en que la mañana de ayer fue muerto a tiros un capitán retirado de la institución del orden, quien además era padrastro de un fiscal adjunto adscrito a la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), con asiento en esta ciudad.
Se trata del capitán retirado de la PN, Armando Arismendi Díaz Inoa, de 77 años de edad, quien residía en Gurabo, al norte de Santiago. Según versiones recogidas en el lugar del hecho, el padrastro del fiscal adjunto Rolando Díaz, adscrito a la DNCD, fue herido de gravedad por dos desconocidos que se desplazaban a bordo de una motocicleta CG, demás datos ignorados, mientras se desmontaba de su vehículo a colocar una basura en un zafacón del sector Reparto del Este, en esta ciudad.
Díaz Inoa falleció cuando era trasladado al hospital regional universitario José María Cabral y Báez de aquí.
El hecho ocurrió próximo a las 6:00 de la mañana de ayer.
La procuradora fiscal de Santiago, la magistrada Luisa Liranzo, declaró que representantes del Ministerio Público realizan las investigaciones para determinar el móvil del crimen. “Estamos trabajando en base a lo recolectado en el área del crimen. Hasta el momento no podemos decir nada”, indicó la magistrada.
Aunque los gatilleros no le robaron nada al hoy occiso, la magistrada Liranzo descartó que el móvil del crimen tenga que ver con las funciones de Rolando Díaz como fiscal.
Los restos de Armando Arismendi Díaz Inoa son expuestos en la funeraria Blandino de la avenida 27 de Febrero de Santiago, y serán sepultados a media mañana de este viernes en el cementerio del Ingenio.
Al capitán retirado le sobreviven su esposa María Tavárez y sus cinco hijos