SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), Rafael «Pepe» Abreu, denunció que hay empresas negociando por montos menores la liquidación con los empleados desahuciados alegando déficit económico por la crisis sanitaria debido al COVID-19.

«Uno se encuentra con empresas, que dicen, ‘mire yo no puedo abrir, no estoy en condiciones de abrir, sino me dan otra suspensión más, tampoco puedo liquidar, porque he estado paralizado’, entonces muchos lo que intenta hacer negociaciones con los empleados por montos menores a las prestaciones que le toca, es decir, en vez de darte 100 por ciento de lo que te toca, ponen 60% o 70%, eso ha creado mucha controversia, muchísimos choques, aunque no sale mucho, se están dando», dijo.

Durante la Entrevista Central de El Despertador del Grupo SIN, Rafael «Pepe» Abreu explicó que son muchas las que están incurriendo a esta estrategia y además un gran número de pequeñas y medianas pidiendo cierre.

«Cuando se suspende por 90 días, el código establece que si la causa persiste, entonces se podría seguir otorgando suspensión, lo que se ha hecho es pasar los plazos de 90 días, tres meses más, pero ocurre que cuando se llega al tope de los seis meses, ya nuestro código plantea la imposibilidad de que se otorgue nuevo plazo de suspensión, porque el empresario está obligado a reintegrar o está obligado (…) a la liquidación», afirmó.

El representante de CNUS indicó que la suspensión tiene un matiz que si el trabajador no presta servicio, el empresario está exonerado de pagar salario, en ese caso, acude a los programas FASE (Fondo de Asistencia Solidaria al Empleado).

«Yo repito estos programas FASE no solo deja el vacío de las regalías, sino que le crea a la gente incertidumbre (…), tampoco han cotizado al Fondo de Pensiones, si el tiempo sin cotización es alto, esas personas al final de su vida laboral por ese vacío, tener derecho a una pensión», aseguró que las reservas bajarán si la situación actual continúa y tendrá dificultad acceder a estos recursos.

Según Abreu, actualmente 300,400 empleados se encuentran desahuciados. En caso de los trabajadores independiente sin laboral es superior, que las personas empleadas directamente.