Los jóvenes arquitectos idearon un proyecto que apuesta por el desarrollo ecoturístico de Barahona. Su propuesta es crear un hotel de montaña que ofrezca espacios sustentables, que no agreda el ambiente y contribuya a elevar la calidad de vida.
Pese a que iniciativas públicas y privadas han tratado de impulsar el turismo en Barahona, su progreso ha sido lento. Para los jóvenes arquitectos Dafne Martínez y José Cabral la solución está en invertir en proyectos hoteleros que respeten el ambiente y los recursos naturales y culturales, a la vez que fomenten el desarrollo socioeconómico de la zona.
El planteamiento está contenido en el proyecto «Arquitectura ecotech como recurso para la preservación del patrimonio natural y el desarrollo turístico», que fue presentado por Martínez y Cabral como tesis de grado en la Escuela de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, y calificada con la máxima puntuación.
El proyecto a desarrollar tiene como punto central la construcción de un hotel que aprovecharía las riquezas naturales de Polo, una de las localidades con más potencial turístico de de Barahona, provincia declarada mediante la ley 266-04 como demarcación prioritaria del Polo Turístico de la Región Suroeste.
Martínez y Cabral diseñaron un hotel cuyas instalaciones permitirían a los huéspedes disfrutar de una estancia confortable, pero al mismo tiempo apegada a lo natural. Están contemplados espacios para spa, gimnasio y sauna, además de una piscina natural, pero además daría facilidades para la realización de actividades al aire libre, como cabalgatas, escaladas, ciclismo, tirolesa, senderismo y fogatas, entre otros.
Justificación del proyecto
Para diseñar su propuesta de hotel ecoturístico, Martínez y Cabral consideraron la aptitud para el turismo y la vocación medioambiental de la provincia de Barahona. Tras investigaciones realizadas, determinaron que los hoteles de este tipo que operan en la zona resultan muy atractivos para los vacacionistas, lo que se comprueba por la alta ocupación que reportan, sobre todo en temporadas altas y fechas especiales.
Entienden que la creación de proyectos con esta tipología influenciarían de forma positiva el desarrollo económico de la región, porque si crece el número de visitantes habrá más demanda de bienes y servicios, y nuevas actividades remunerativas en las que puedan participar los habitantes de la zona.
Con la creación de un hotel ecoturístico buscan fomentar la interacción entre las personas y la naturaleza y que esta zona, de abundantes reservas naturales, cuente con espacios arquitectónicos de bajo impacto, para dar cabida a quienes buscan hacer turismo alternativo
Emplazamiento óptimo
La ubicación elegida para desarrollar el proyecto se encuentra en el municipio de Polo, al final de la Calle Pedro Bello, cerca del balneario Mata de Maíz. Es un terreno que cuenta con una topografía accidentada y variados paisajes naturales en los diversos puntos del emplazamiento; además, es un solar con muy buenas condiciones climáticas y ambientales.
Posee excelente atractivo ecológico, ya que se encuentra enclavado en la exuberante loma de Mata de Maíz, donde la naturaleza aún no ha sido perturbada con construcciones ajenas a ella por lo que cuenta con una abundante vegetación tropical.
El solar posee una forma irregular, dada por la calle Pedro Bello al oeste y el balneario Mata de Maíz al sur; cuenta con un área de 237,019.03 m2. Lo accidentado del terreno es debido a que el río lo atraviesa y posee dos colinas, al este y al oeste.
Otra ventaja de la ubicación es que no existe ninguna oferta hotelera de este tipo en todo el municipio de Polo, lo cual asegura la rentabilidad del emplazamiento.
Concepto arquitectónico
«Un hotel ecoturistico debe estar en equilibrio con su entorno, debe integrarse de tal manera que no rompa la estructura natural del ambiente; y más aún, que esa estructura posibilite que todo cuanto nos rodea coexista en armonía», explicaron los jóvenes profesionales.
Expresaron que el concepto natural de equilibrio es clave para propiciar entes arquitectónicos armoniosamente integrados en su medio ambiente natural. Recordaron que el equilibrio natural está presente desde el nivel bioquímico hasta el ecológico.
Los sistemas de equilibrio y la estructura de la vida desde el nivel químico constituyen el concepto en base al cual desarrollaron el proyecto arquitectónico.
Destacaron que cuando se habla de las estructuras de la vida a nivel químico es importante tomar en cuenta que el carbono es el elemento químico que propicia la vida y que caracteriza por su flexibilidad para formar enlaces con otros elementos químicos, formando uniones de todo tipo, simples, dobles y triples.
Partiendo de esa estructuración química que da lugar a la vida, y conceptualizado su desarrollo dentro de un sistema de múltiples organismos vivos, buscaron la evolución gráfica del concepto, para luego materializarlo en un ente arquitectónico.
De la mano del ecoturismo
Los arquitectos Martínez y Cabral plantearon que el turismo causa un daño considerable en el medio ambiente, porque contribuye a la depredación y contaminación de los recursos naturales cuando no existe una rigurosa aplicación de las leyes de preservación de los recursos naturales.
Señalaron que es común que en la República Dominicana los proyectos arquitectónicos destinados al turismo produzcan un impacto negativo que influya de forma significativa en la estabilidad del medio ambiente. «El desequilibrio medioambiental que provocan los complejos turísticos tienen que ver sobre todo con la contaminación de los recursos hidrológicos y la amenaza a la biodiversidad con la tala indiscriminada de los bosques», aseguraron.
Los profesionales de la arquitectura trajeron a colación el Reporte de Competitividad para los Viajes y el Turismo (RCVT) 2009, elaborado por el Foro Económico Mundial, donde se determinó que uno de los puntos que requiere mayor atención en el turismo dominicano es de la sostenibilidad del medio ambiente.
Pese a ello, sostienen que en la actualidad están ganando popularidad nuevas formas de hacer turismo a nivel nacional; entre estas el turismo ecológico, cuya principal preocupación es garantizar que se produzca una actividad turística responsable, y se cree un vínculo entre naturaleza y visitante
La Región Sur de la República Dominicana, según exponen, cuenta con un repertorio de recursos naturales de singular belleza, además que forma parte del sexto polo turístico del país, junto a Enriquillo y Pedernales, sin embargo tiene poca participación en el escenario turístico nacional, lo que atribuyen, entre otras razones, a su limitada infraestructura hotelera, aunque reconocen que la situación ha cambiado un poco en los últimos dos años debido al interés de las autoridades por sentar las bases para la inserción de la zona en el sector turístico.
Materiales utilizados
Para que el proyecto sea realmente ecosustentable, los proponentes sugieren una serie de materiales que son compatibles con el medio ambiente, entre ellos:
Bloques de termoarcilla: diseñados de tal forma que permiten una colocación cómoda, un ahorro de mortero considerable y unos rendimientos en obra mejores que los de otros tipos de fábrica.
Mortero de arcilla eco-clay: se aplica para cubrir fisuras y allanar superficies. Se mezclará manualmente con un 25% de agua. Es preferible amasar y dejar reposar al menos 3 horas antes de la aplicación.
Piedra laja veteada: las lajas son una buena alternativa en una construcción sostenible, porque son resistentes al agua, al sol y a las agresiones químicas, y además brindan protección y un aspecto natural a las estructuras.
Pilares de pino: los pilares de pino tratado se utilizan para la cimentación de las edificaciones.
Madera machihembrada de pino: se utiliza para revestimiento de muros, pisos y cielorrasos.
Rollo de corcho: son utilizados en pisos y paredes dadas sus excelentes propiedades aislantes acústicas. Existe en diversos grosores. Mientras más grueso más aislamiento acústico proporciona.
Cristales one way: son cristales hechos de vidrio con una capa muy fina de aluminio, que les da reflectividad de un lado y transparencia del otro. Se utilizan en puertas, ventanas y segmentos de muros de la edificación.
Tejas de cerámicas españolas: ideales para cubiertas, y se pueden colocar en dos posiciones diferentes, con la concavidad hacia abajo o hacia arriba. Esta última recibe el nombre de «teja canal».
Tejas de vidrio transparente: parecidas a las tejas convencionales, con la ventaja de que conserva su transparencia a través del tiempo. Son resistentes al fuego, no producen efecto lupa, ni son susceptibles a la adherencia de suciedad. El coeficiente de transmisión lumínica es superior a 86%