https://wp.me/pbcL6T-9VZ Puerto Príncipe, – 7 de abril de 2025 – La comuna montañosa de Kenscoff, en las alturas de Puerto Príncipe, ha sido escenario de una violencia extrema durante los últimos dos meses, dejando un saldo escalofriante de al menos 262 personas muertas y 66 heridas. Así lo revela un contundente informe publicado hoy por la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (BINUH) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH).
La investigación exhaustiva de la ONU detalla la brutalidad sistemática de los ataques, cuyo objetivo principal era sembrar el pánico entre la población civil. Hombres, mujeres y niños fueron ejecutados dentro de sus hogares, mientras que otros fueron asesinados a tiros al intentar escapar de la violencia por carreteras y senderos. Los cuerpos de las víctimas fueron incluso quemados. El informe también documenta actos de violencia sexual, incluyendo violaciones contra mujeres y niñas.
La ofensiva de los grupos criminales, motivada por la expansión de su control territorial hacia las zonas montañosas de Kenscoff y la desestabilización de la comuna de Pétion-Ville, provocó la destrucción o incendio de aproximadamente 200 viviendas y el desplazamiento forzado de más de 3.000 personas.
Según el informe, si bien las fuerzas de seguridad haitianas desplegaron efectivos en Kenscoff tras un retraso inicial el 27 de enero, lograron fortalecer gradualmente su presencia con el apoyo de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS), a pesar de sus limitados recursos. Este despliegue ha logrado frenar el avance de los grupos criminales, pero no ha restablecido por completo el orden público. Los últimos ataques, registrados entre el 24 y el 27 de marzo, evidencian la continua presencia y capacidad operativa de múltiples células criminales en la zona. Desde el inicio de la violencia, cuatro miembros de las fuerzas de seguridad han perdido la vida y otros cuatro han resultado heridos, sumándose a un miembro herido de la MMAS.
A pesar de la asistencia humanitaria y las medidas de protección brindadas por servicios estatales, agencias de la ONU y diversas organizaciones no gubernamentales (ONG), la ayuda se considera insuficiente ante la magnitud de las necesidades y el profundo trauma psicológico que sufren los sobrevivientes, especialmente los niños que han sido víctimas o testigos directos de violencia extrema, incluyendo la sexual.
El informe de la ONU concluye con recomendaciones dirigidas a las autoridades haitianas y a la comunidad internacional para mejorar la seguridad en la zona y brindar apoyo efectivo a las fuerzas de seguridad. La investigación, basada en un riguroso proceso de documentación y verificación, identificó seis etapas claras en el desarrollo de los ataques en Kenscoff, detalladas en el documento publicado hoy.
FUENTE https://espacinsular.org/