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El proceso de floración de los cafetales, vital para la obtención de fruto, ya suma cinco años bajo condiciones adversas provocadas por el cambio climático, y estas se mantendrán durante 2016, advirtió la Fundación Salvadoreña para Investigaciones del Café (Procafé).
En un informe técnico difundido el viernes, y elaborado a finales del año pasado, Procafé señaló que el patrón de floración del café se ha alterado en los últimos cinco años, debido a las altas temperaturas que se registran entre enero y marzo, y las lluvias insuficientes de abril.
La floración “es la fase (…) del cultivo de mayor importancia; sin flores, el cafeto no da frutos”, destaca Procafé. Normalmente, este proceso inicia en enero y los botones florales crecen a medida en que incrementa la humedad, hasta que se abren con las primeras lluvias, que aparecen en marzo o abril.
Sin embargo, desde hace cinco años, los primeros tres meses del año han sido “extremadamente secos y calurosos” y en abril se reportan lluvias inferiores a los 15 milímetros, que aunque favorecen el crecimiento de las flores, no son suficientes para que el suelo acumule la humedad necesaria para que el proceso continúe. En 2015, los datos recopilados por Procafé indican que en las zonas cafetaleras ubicadas en las tres regiones del país reportaron bajos acumulados de lluvia, oscilando entre cero y 28 milímetros.
Estas condiciones se mantendrán durante 2016, indicó. por la influencia del fenómeno El Niño. En los primeros siete meses, las lluvias disminuirán, y cambiarán su frecuencia y cantidad. Es decir, se esperan menos días con lluvia y grandes cantidades de lluvia en cortos periodos de tiempo.
Mientras tanto, se espera que la temperatura sea hasta 0.2 grados centígrados superior al promedio.
La fundación indicó que, según los pronósticos para los primeros meses de este año, las zonas cafetaleras ubicadas por debajo de los 1,000 metros sobre el nivel del mar perderán “las condiciones de clima aptas para darle continuidad al cultivo del cafeto”.
Esto significa que el deterioro en estas zonas continuaría y las pérdidas serían cada vez más profundas.
Además de cuidar la floración del café con una serie de medidas (ver recuadro), la Fundación recordó que los productores deben proteger sus plantaciones del hongo de la roya.
Las lluvias reportadas entre agosto y noviembre de 2015 fueron más abundantes de lo normal y el índice de infestación pasó de 5 al 30 % en los cafetales, indicó Procafé.
¿Cómo cuidar la floración?
Poda
La poda de sombra debe aplazarse, advierte Procafé. Se debe seguir el ritmo de las lluvias y hasta que el suelo acumule más de 70 milímetros de agua, se puede iniciar la poda.
Fertilizantes
Las lluvias entre enero y marzo ayudarán a iniciar la floración, pero no a mantenerla. Por eso recomiendan aplicar fertilizantes foliares para apoyar este proceso.
Suelo
Es urgente que los caficultores inviertan en obras de conservación de suelo, que eviten la erosión y favorezcan la infiltración del agua y garantizar un mejor micro clima para el café.
Reforestación
Procafé también considera necesario que se retomen las tareas de siembra de árboles de sombra, pues uno de los medios más efectivos para enfrentar los efectos de la sequía.
0.2 Grados centígrados
Se prevé que la temperatura en los primeros meses del año sea 0.2 grados centígrados superior al promedio.
30 % Roya
Debido a las lluvias de los últimos meses de 2015, superiores a lo normal, el índice de infestación de roya subió a 30 %.
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