SANTO DOMINGO, R.D. – A partir de este lunes, la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) ha comenzado a aplicar una retención del 2% sobre todas las ventas realizadas a través de tarjetas de crédito y débito, una medida que afecta a comercios de todos los tamaños en la República Dominicana.
La disposición, que se enmarca dentro de la Norma General 06-2023 y su regulación complementaria, forma parte de las recientes modificaciones en el esquema de retención del Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS). Esto significa que, desde hoy, cada transacción electrónica realizada con tarjeta en cualquier establecimiento comercial será automáticamente sujeta a esta deducción por parte del fisco.
Las autoridades justifican la medida como un paso esencial hacia una mayor formalización de la economía y un reforzamiento en el combate a la evasión fiscal. Se espera que esta retención contribuya a una mayor transparencia en las operaciones comerciales y a una ampliación de la base tributaria.
Sin embargo, la implementación de esta retención del dos por ciento ya está generando preocupación en diversos sectores productivos del país. Existe la inquietud de que la medida podría desincentivar el uso de tarjetas de crédito y débito por parte de los consumidores, lo que potencialmente impactaría el volumen de ventas y la fluidez de las transacciones electrónicas.