Por Wellington Pérez Hace unos años el hoy ministro de Obras Públicas era un total desconocido entre la gente de a pie de la provincia de Barahona.
A raíz de la campaña presidencial del 2012 que llevó a Danilo Medina al poder, todos conocieron al señor Gonzalo, el cual preñó de esperanzas esta pobre provincia. Hago la breve observación porque todos los de allá y los de aquí conocemos la eficiencia de Gonzalo como ministro, pero esa eficiencia y buena gestión no la pone en prácticas cuando se trata de Barahona.
El señor ministro tiene obras anunciadas en Barahona que ya no les caben en el bolsillo. Desde la construcción de un mercado público y la planta de tratamiento de agua residuales hasta la terminación de un estadio de béisbol en Cabral que tiene más de tres años esperando por él.
Como hoy todo se archiva aquí les dejare algunos anuncios de mi coterráneo por nacimiento:
-“Para Barahona tenemos el presupuesto y los recursos para la construcción del mercado, el matadero, los 384 apartamentos en Ciudad Esperanza, para la eliminación de los dos barracones que quedan”,
-“MOPC pavimentará las calles de Cabral.”
-“Tengo una deuda con Barahona, y esa deuda la comenzaremos a cumplir a partir de enero del 2018”.
Ojala el ministro entienda que no solo la carretera Bahoruco-Ciénaga existe, que también un puente que comunica Polo con Cabral requiere de su eficiencia.
Por él espera la carretera Cabral-Peñón, el asfaltado de múltiples calles de la provincia, entre otras obras.
Cumpla sus promesas Gonzalo. ¡Barahona se lo recompensará!.