SIN CATEGORÍA

SUPLANTACIÓN DEL ESTADO Y LA CIUDADANÍA

Por
José Miguel Medina Tejeda

SUPLANTACIÓN
DEL ESTADO

Si en nuestros países
la justicia tuviera vendados los ojos, tal vez la radio pudiera taparse la boca
y no meterse a mediadora.

Pero   ése  
es   el   problema,  
que   las   instancias  
públicas   son   frágiles,  
que   la corrupción   crece  
más   rápido   que  
la   mala   hierba  
y   muchos   ciudadanos  
y ciudadanas, aunque constitucionalmente tengan garantizados sus
derechos, en la vida cotidiana no saben a quién recurrir cuando se los
conculcan.

Los  medios  
de   comunicación  
no   son   tribunales,  
pero   sí  tribunas 
donde   la ciudadanía puede
ejercer presión para que sus reclamos sean escuchados. No es la emisora la que
va a solucionar los problemas. Para eso tenemos al Estado y no Pretendemos
suplantar sus instituciones.
Cuando decimos una
radio que resuelve nos referimos al significado original de esta palabra:
resolver significa desatar.

La  ciudadanía 
suele  tener  atada 
la  lengua.  Hay demasiadas arbitrariedades  y burocracia,   demasiadas  
discriminaciones,  
demasiadísima   exclusión   en  
los responsables   de   garantizar  
los   derechos. 

 Corresponde  
a   los   medios  
de comunicación  la  tarea de 
desatar  la palabra,  de soltar  
la voz del  pueblo,  de  la gente   común  
y   silvestre,   de  
aquellos   y   aquellas  
que   no   tienen  
influencias   ni  transitan por los pasadizos del poder. Aunque   los  
programas   de   intermediación   sean  
calientes,   a   veces  
de   fuego Cruzado,  no buscan provocar ni  prolongar 
la guerra, sino contribuir a 
terminarla.
Estos espacios se  inscriben en 
la  lógica de  la Cultura de Paz y  fortalecen 
la Democracia   y   la  
gobernabilidad.   Una   democracia  
y   una   concertación   social Basada, obviamente, sobre la igualdad
de todos y todas ante la ley.

SUPLANTACIÓN
DE LA CIUDADANÍA

Si peligroso sería
intentar suplantar las funciones del Estado, se corre un Similar erosionando la
responsabilidad ciudadana y promoviendo una espePaternalismo radiofónico.

Recuerdo haber
escuchado en una radio

— ¡A ver si viene el
camión de la basura a llevarse un burro muerto que hay Aquí en la colonia!…
¡Ya no se aguanta la jedentina!

— ¿Y cuánto tiempo
lleva ese burro ahí? —preguntó la periodista.
— ¡Lleva tres días y la
alcaldía ni se asoma!

— ¿Y por  qué 
los vecinos no agarran un mecate y sacan al  animal 
y  lo Queman?

— ¡Qué chula, vos! ¡Con
la calor que hace y lo que jiede el burro! ¿Y eso no Le toca a la alcaldía?  ¿Por qué nos vamos a pijiar nosotros los
vecinos si de ellos Es la responsabilidad?
La moneda tiene dos
caras. Las autoridades deben comprometerse y cumplir. Y Las comunidades deben
comprometerse y participar. A la emisora le toca recordar Ambos compromisos.

A la hora de recibir
las denuncias, serán infaltables las preguntas sobre la actitud Propositiva   de  
quienes   llegan   a   la   radio,  
sobre   las   iniciativas  
tomadas,   las Gestiones
adelantadas ya,  a qué  instituciones han acudido,  por 
qué no  les han Hecho caso.

Al Estado rogando y con
el mazo dando. Porque no es cuestión de disfrutar mis Derechos   (ciudadanía  
pasiva)   sino   también  
de   asumir  mis  
responsabilidades (Ciudadanía activa). ¿Exijo una ciudad limpia? Debo
pagar mis impuestos. ¿Quiero Vivir en un barrio seguro? Me organizo con los
vecinos para cuidarlo.

La regla de Oro del
cristianismo es válida para la ética ciudadana: hagan a los demás lo que Quieran
recibir de ellos.Una mente ciudadanizada sentirá como propios los espacios
públicos. Por eso, no arrojará botellas en el 
parque. Respetará como propia  la
propiedad pública. Por Eso, no robará al Estado.

Y   al  
revés.   Una  mente  
ciudadanizada   pensará   y  
sentirá   como   públicos  
los Espacios propios. Por eso, no maltratará puertas adentro a nadie de
su familia, ni  Siquiera al perro que fue
a pedir cobijo.