SIN CATEGORÍA

Una nueva tanda de correos de Clinton da munición a sus rivales republicanos

La exsecretaria de Estado de Estados Unidos (2009-2013)
WASHINGTON. Una nueva tanda de correos electrónicos de Hillary Clinton, la mayor publicada hasta la fecha, ofreció hoy una munición impagable a los precandidatos republicanos a la Presidencia de EE.UU. y acentuó el problema de confianza que tiene la favorita demócrata entre los ciudadanos.
La polémica sobre el uso de un servidor privado cuando era secretaria de Estado (2009-2013), que persigue a Clinton desde marzo, entra ahora en una nueva fase después de conocerse la noche de este lunes que 125 correos contenían información clasificada.
El Departamento de Estado, encargado de revisar y publicar los correos, publicó a última hora de ayer una nueva tanda de mensajes de Clinton, 4.368 en más de 7.000 páginas, en la que un dato ha hechos saltar todas las alarmas: 125 contenían información reservada.
Uno de los principales argumentos de Clinton para defenderse en esta polémica, la gran piedra en el zapato hasta ahora de su campaña por la candidatura demócrata, era precisamente que nunca había enviado información clasificada a través del servidor de correo privado que instaló en su residencia de Nueva York para sus comunicaciones como jefa de la diplomacia.
El Departamento de Estado dijo ayer que el contenido editado o eliminado de los mensajes no estaba clasificado en el momento del envío pero sí ahora, explicación que no ha bastado para despejar la sombra de la duda ni a ojos de los rivales republicanos ni a ojos de los ciudadanos.
Las encuestas apuntan a que uno de los talones de Aquiles de Hillary Clinton es que la mayoría de los ciudadanos cree que no es transparente, honesta ni confiable, una imagen reforzada por la polémica de los correos y la controversia sobre posibles conflictos de interés en las donaciones extranjeras a la Fundación Clinton.
“La gente debería confiar en mí, yo no puedo decidir cómo serán los ataques infundados de la derecha, pero haremos lo mejor para responder. Confío al cien por cien en que el votante sabrá ver que esas acusaciones no tienen base ni pruebas”, dijo Clinton el pasado 7 de julio en la primera entrevista nacional de su campaña, con la CNN.
Conocedores de este punto débil de la candidatura de Clinton, sus contrincantes republicanos en la carrera a la Casa Blanca en 2016 la acusaron hoy de haber dañado la seguridad nacional y de no ser digna de confianza para liderar el país.
“En centenares de ocasiones, el imprudente intento de Hillary Clinton de intentar esquivar las leyes de transparencia puso información sensible y nuestra seguridad nacional en riesgo”, consideró hoy en un comunicado el presidente del Comité Nacional Republicano, Reince Priebus.
“Con el FBI (Buró de Investigaciones Federales) aún investigando (los correos), el creciente escándalo sobre el correo electrónico de Hillary Clinton demuestra que no se le puede confiar la Casa Blanca”, añadió Priebus.
El candidato republicano Donald Trump, que acorta distancias con Clinton en las encuestas, fue uno de los primeros en reaccionar a través de su cuenta de Twitter.
“150 correos de Clinton contienen información clasificada. Más sensible teniendo en cuenta que era secretaria de Estado. Eso es un gran problema”, escribió el magnate.
El segundo en las encuestas republicanas, Jeb Bush, también usó Twitter para responder: “La transparencia -afirmó- es importante, por eso yo publiqué mis correos en un libro electrónico sin secretismo o citación”.
El hijo y hermano de expresidentes hizo así gala de su decisión de publicar el pasado febrero, sin que nadie se lo pidiera, miles de correos electrónicos de sus años como gobernador de Florida (1999-2007).
Otro de los candidatos republicanos destacados en los sondeos, el gobernador de Wisconsin, Scott Walker, quiso subrayar que la polémica en torno a los correos de Clinton es “una cuestión de seguridad nacional”.
“Ella puso nuestra seguridad nacional en riesgo, teniendo esa información en servidores no seguros. Los chinos y los rusos saben más que el propio Congreso (de EE.UU.)”, dijo hoy Walker a la cadena conservadora Fox.
La campaña de Clinton tiene por delante el reto de desviar la atención de la polémica de los correos que, con una publicación a cuenta gotas, promete perseguir a la candidata durante toda la carrera presidencial.