Por Ahora Noticias RD
San José de Ocoa – La desesperación tiene rostro de madre joven en el sector La Agüita de San José de Ocoa. Rosmery Encarnación, con tres pequeños hijos a su cargo, ha lanzado un angustioso llamado al presidente de la República, Luis Abinader, a empresarios y a la ciudadanía en general, solicitando ayuda urgente para la reparación de su vivienda, la cual se encuentra en un estado crítico y representa una amenaza constante para su familia.
Encarnación relata con profunda preocupación cómo las condiciones de su hogar han llegado a un punto insostenible. El piso de tierra dificulta la higiene, y el techo, severamente deteriorado, permite que la lluvia se filtre sin piedad, generando acumulaciones de lodo y exponiendo a sus hijos a enfermedades y peligros. “Llueve más adentro que afuera”, lamenta la joven madre, cuyo esposo actualmente se encuentra desempleado, agravando aún más la precaria situación económica familiar.
La esperanza se encendió hace dos años cuando, según su testimonio, representantes de la Gobernación de San José de Ocoa visitaron su humilde morada. Se firmaron documentos con la promesa de la construcción de una nueva casa, pero esa promesa, denuncia Encarnación, quedó en el olvido. “Antes nos ayudaban con algunas cosas, pero ahora todo se nos hace difícil. Siempre nos niegan las ayudas, como las fundas de comida, ya no nos miran”, expresó con una mezcla de frustración y desamparo.
El temor a una tragedia inminente consume a Rosmery. La fragilidad de la estructura de su hogar se acentúa con cada lluvia, aumentando el riesgo de un colapso. “Cada vez que llueve, la casa se derrumba más. Tengo miedo de que un día se caiga encima de nosotros y pase una desgracia”, suplica con la voz quebrada.
Con la mirada puesta en el bienestar de sus hijos de 8, 5 y 2 años, Encarnación apela directamente a la sensibilidad del presidente Abinader, rogándole su intervención para encontrar una solución definitiva a su calamitosa situación. Un techo seguro no es solo una necesidad básica, sino una garantía para la salud y el futuro de sus pequeños, quienes, según cuenta, carecen incluso de ropa adecuada debido a la humedad y el deterioro en el que viven. La falta de recursos obliga a Rosmery a cocinar con leña, sumando una dificultad más a su ya ardua rutina.
La comunidad y las personas de buen corazón que deseen solidarizarse con esta joven madre y sus hijos pueden comunicarse directamente con Rosmery Encarnación a través de los números de teléfono 829-897-1179 y 849-384-7415. Su ayuda puede marcar la diferencia entre la angustia y la esperanza de una familia que clama por un hogar digno.
